miércoles, 2 de abril de 2014

Caer siete veces y levantarse ocho

A una semana del día de la elección de plaza, cuando ya casi tengo decidida la especialidad, no quería pasar sin escribir una entrada dedicada a todos aquellos que se han quedado por el camino y no van a poder estar los próximos días 10 y 11 de Abril en Madrid.

Desde que han salido los resultados provisionales he hablado con amigas, compañeras de la universidad y he leído todo tipo de opiniones en foros, lo que me ha servido para darme cuenta de la suerte que he tenido por haber conseguido un hueco dentro de la próxima promoción de residentes; pues lo que está claro es que aunque unos hayamos obtenido plaza y otros se hayan quedado a las puertas no significa (en muchos casos) que los primeros hayan estudiado mucho más que los segundos. Entiendo por ello que haya gente que pueda sentirse frustrada y desencantada con el EIR, que tenga ganas de tirar la toalla y darse por vencida. 

En mi opinión, es un error.

Personalmente he de admitir que he tenido mucha ayuda a la hora de preparar el EIR, pues era algo que tenía decidido desde hace años y ya en Marzo, cuando ni siquiera había terminado la carrera, comencé a prepararlo. Es decir, que mi primer simulacro presencial en Madrid fue un par de días después de defender mi Trabajo Fin de Grado en la Escuela. 
Por ello cuando digo que he tenido mucha ayuda me refiero a que me he podido permitir terminar el Grado y dedicarme exclusivamente a estudiar el EIR (ni siquiera me apunté a la bolsa de trabajo para evitar posibles tentaciones). Sé que no todo el mundo puede permitirse esto, que muchos tienen que compaginar el estudio con trabajo, la familia u otras mil cosas que al final repercuten en las horas de estudio.
Bien es cierto que no por haber podido tener esta libertad de dedicarme a estudiar todo ha sido fácil. Más allá de que muchas de mis compañeras y amigas comenzaban a disfrutar de sus bien merecidas vacaciones de verano cuando yo estaba encerrada en un hotel haciendo encuentros intensivos del EIR, también tuve que rechazar la posibilidad de empezar a hacer mis primeras sustituciones de verano (cosa que me hizo plantearme varias veces si estaría haciendo bien apostándolo todo a una única carta y perdiendo mientras tanto los puntos y experiencia que mis amigas estaban adquiriendo durante esos meses) y organizar toda mi vida alrededor de un único objetivo diario: estudiar. De verdad os digo que levantarte un fin de semana de Agosto a las 8 am para ponerte a estudiar, encender el ordenador y encontrarte en Facebook con todas las fotos de tus amigas de fiesta la noche anterior...es algo muy duro.

Por eso entiendo que aquellos que han pasado por lo mismo que yo, que han sacrificado mucho, no lo han conseguido y ahora sienten que no podrían haber hecho más, quieran dejarlo de lado para siempre. Sin embargo quiero recordarles que no todo el EIR es estudiar (aunque desde luego es lo que más tiempo y esfuerzo lleva), una parte importante es saber hacer ese tipo de examen, otra tener confianza en que se puede lograr y la definitiva es ese pedacito de suerte que siempre aparece en los exámenes.
Si ese día te levantas con el pie izquierdo, si los nervios te dejan en blanco, si te duele la cabeza, si te caen unas cuantas preguntas de esas que no tienes ni idea de dónde las pudieron haber sacado (porque no hay que olvidar que la realidad del EIR es que a pesar de los tochos que nos dan las academias para estudiar, no tiene temario oficial), todo ello va a sumar y/o restar netas frente al resto de opositores.

Así que no por haberse quedado sin plaza esta vez significa que lo hayas hecho mal o que no sirvas para ello. Esto, como cualquier otra oposición, es una carrera de fondo en la que hay que aprender a repartir esfuerzos y saber levantarse y continuar si tropiezas. Nadie dice que lo vayas a conseguir a la primera ni que no lo vayas a hacer hasta la tercera vez, simplemente da todo lo que puedas y llegará tu oportunidad.

Yo escogí ponerme a estudiar el EIR al terminar la carrera por comodidad, porque sabía que si esperaba un tiempo me iba a dar más pereza o iba a tener otras obligaciones que no me iban a permitir esa exclusividad. Pero desde el principio sabía que no iba a ser posible repetirlo de esta manera en caso de no sacar la plaza (lo cual seguramente también me azuzó cada vez que me venía abajo); sin embargo nunca se me pasó por la cabeza que si no lo sacaba así nunca iba a ser capaz de hacerlo mejor. Tendría que hacerlo de otra manera, desde luego que tendría que ponerme ya a trabajar en lo que pudiese y que el hecho de haberme quedado embarazada en Noviembre iba a cambiar radicalmente las siguientes oportunidades; pero ser enfermera especialista era lo que quería y eso no me lo iban a quitar.

Recordar que desde el momento en que obtenemos el título al terminar la universidad ya siempre vamos a poder ser enfermeras generalistas, pero para convertirnos en especialistas vamos a tener que luchar un poco más por ello y, lo mejor de todo, es que no hay una edad límite para conseguirlo. 
Échale el tiempo que necesites, prepáralo como puedas o quieras, pero no dejes que una única convocatoria fallida te quite la ilusión de conseguir lo que realmente quieres.

Tómate tu tiempo y vuelve a empezar, si otros pueden lograrlo ninguno somos menos que los demás, tú también podrás. La opción fácil de no hacer nada siempre la vas a tener disponible. 
Eso sí, nunca pienses que va a ser un camino fácil o que puedes no darlo todo para conseguirlo; la historia que a todos nos cuentan de esa chica que consiguió su plaza sin apenas estudiar...no existe.

"Muchos de los fracasos de la vida son de personas que no se dieron cuenta cuán cerca estaban del éxito cuando se dieron por vencidos." (Edison)

5 comentarios:

  1. Estoy de acuerdo contigo al 100%. Si que es verdad que cuando dices que tienes suerte por estar en esta promoción, te diría que no.. suerte es la tiene aquel que le ha tocado la loteria, tú por lo que puedo ver, te lo has currado de verdad y te lo mereces como la que más, por lo que es totalmente justo. Lo que no lo es que es haya tan pocas plazas y tanta gente que también haya estudiado y no lo pueda conseguir... pero de eso la culpa no es nuestra, sino de los de arriba.

    Qué identificada me siento cuando has dicho lo de levantarte a estudiar en agosto y ver las fotos de las amigas, que duro es en el momento que sea verano, fiesta o domingo por la tarde y que tú estés ahi, muerta del asco frente a tus apuntes, mientras ves que todos a tu alrededor disfrutan. Pero eh, ¿a que ahora no lo cambias? ¿a qué te sientes mejor que nunca? por estos sentimientos encontrados precisamente fui valiente en seguir adelante, en pensar, si, yo ahora estaré así pero en marzo, abril... la que disfrutaré seré yo.

    Yo, al igual que tú, fui a por todas, porque pensaba que podía ser mi mejor trampolín para trabajar, fuera a parte de tener dos años de trabajo que ahora es tan dificil, porque se que en un futuro la especialidad de enfermería vendrá pisando fuerte. Y ahora nos hemos sacrificado nosotras, pero confío en que no sea en vano y nos sirva además de para formarnos dos años.

    Que te vaya muy bien en la elección de plazas y consigas lo que quieras!

    ¡Besos!

    ResponderEliminar
  2. Hola!

    Aquí estoy yo en 2015, a un año de acabar la carrera, decidiendo si hacer la locura del EIR o no. Me he leído tu blog de arriba a abajo (he de confesar que hasta he echado alguna lagrimilla) y la verdad que me ha dado mucho que pensar.

    Ha pasado tiempo desde tu última entrada y no se si alguna vez responderás a esto pero, yo sólo necesito una respuesta... visto en perspectiva ¿merece la pena? ¿me servirá el EIR para tener algo más de 2 años de experiencia?

    Muchas gracias por compartir tu experiencia y espero que todo te vaya muy bien!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Buenas Eva! :)

      Por alguna razón me ha llegado un mail con tu comentario (yo juraría que para comentarios anteriores no me había llegado nada) y sólo te puedo decir una cosa: SIN DUDA, VETE A POR ELLO!

      No llevo tanto tiempo haciendo la especialidad como para verla con mucha perspectiva (mientras estudiaba el EIR me quedé embarazada, así que al poco de empezar estuve unos cuantos meses de baja maternal por lo que estoy a medio camino entre los R1 y los R2) pero. sabiendo lo que llevo hasta ahora, yo volvería a hacerla sin pensarlo.

      Al final me decidí por Comunitaria y la pude hacer en "casa" (en Asturias), y siendo objetiva creo que hay muchas cosas que mejorar (que lo harán, seguro; no llevamos muchas promociones y cada año van cambiando para mejor) pero a mi me encanta.
      Veo a mis compis que no se decidieron a hacer el EIR en su momento (muchas de las cuales están ahora intentándolo o pensando en hacerlo, xq sinceramente, esto va a ser el futuro), veo lo que ellas han ganado en el tiempo que yo dediqué a estudiar y dónde nos encontramos ahora y, personalmente, creo que cogí el mejor camino (o al menos en el que yo me encuentro más feliz).
      Sí, ellas pueden tener más soltura trabajando como enfermeras (sobretodo porque terminar la carrera y meterte de lleno al EIR sin haber trabajado nunca hace que sigas siendo un poco "alumna" para todo el mundo) pero creo que lo que voy a a tener yo cuando acabe (más allá de los puntos, más allá de los años cotizados, etc) nunca lo podría haber obtenido sin pasar por la residencia.
      Hacer una especialidad te da la oportunidad de rotar por muchos sitios que en condiciones normales no podrías conocer así como así, te permite ver las cosas de una manera más amplia, con mayor perspectiva, saber un poco de todo y, lo que yo más agradezco, no te deja encasillarte es ser una "pincha-culos" xq siempre tienes que estar moviéndote y aprendiendo :P

      Escucharás opiniones para todos los gustos; mucha gente cree que esto es una moda que no vale para nada o que evita que a base de andar danzando de un lado para otro, de una planta para otra, cojas la experiencia necesaria para poder enfrentarte "como debe ser" al mundo enfermero.
      Yo qué quieres que te diga, creo que mejor formada de lo que voy a salir después de estos dos años nunca podría haberlo estado.Y aunque queda mucho camino por avanzar con respecto a las especialidades y, sobretodo, los especialistas tenemos mucho que pelear para que sea reconocido nuestro esfuerzo; el EIR no es sólo asegurarte un trabajo de dos años, es mucho más, es la llave que te permitirál transformarte en la enfermera que tú siempre supiste que querias ser. :)

      Eliminar
  3. Buenas noches, lo primero ¡¡enhorabuena por la plaza!! Veo que estás muy contenta.
    Acabo enfermería este año y quiero presentarme al EIR, ¿con qué academia te lo preparaste? Es que hay bastantes opciones y estoy indecisa, ¿cuál tiene mejor temario?. Muchas gracias.

    ResponderEliminar
  4. Me encantó tu post porque refleja a la perfección lo que pasan muchas personas al presentarse a las oposiciones, como diría el dicho, "no nos miden las veces que fracasamos sino las veces que nos levantamos"

    ResponderEliminar